La tecnología y la automatización de procesos serán los responsables de la creación de 1.250.000 empleos entre 2017 y 2022, según Randstad. El informe “La digitalización: ¿crea o destruye empleo?”, elaborado por Randstad Research, analiza las consecuencias directas de la aplicación de la tecnología al ámbito empresarial y sus resultados en el mercado laboral.
Randstad Research prevé que la digitalización genere 1.250.000 empleos en los próximos cinco años. De esta cifra, 390.000 empleos estarán vinculados a profesiones relacionadas con los llamados STEM, es decir, con conocimientos en ciencia, en tecnología, en ingeniería y en matemáticas. Además, un total de 689.000 empleos corresponderán a empleos inducidos, que darán soporte a los STEM, mientras que 168.000 serán empleos indirectos.
No obstante, para que esta generación de nuevas oportunidades de trabajo sea efectiva, Randstad advierte que dependerá de los esfuerzos de todos los agentes sociales implicados en el mercado laboral. En este sentido, el director de Relaciones Institucionales de Randstad, Luis Pérez, afirma que estas soluciones “pasan por flexibilizar un mercado de trabajo encorsetado, así como facilitar la re-educación de los profesionales con políticas de empleo adecuadas, llevar a cabo iniciativas para aumentar el número de estudiantes universitarios STEM y fomentar la movilidad de los profesionales para satisfacer la necesidad de las compañías”.
Escasez de perfiles STEM en España
A pesar de estos buenos augurios en cuanto a la posible creación de empleo, el centro de estudios y análisis del grupo Randstad en España detecta un déficit de profesionales con estas habilidades STEM que las empresas van a demandar, pero que no van a poder cubrir completamente ante la falta de candidatos. Mientras las compañías requieren profesionales que puedan aumentar su capacidad de generar negocio en áreas relacionadas con la digitalización y automatización de procesos, los perfiles existentes en el mercado laboral son insuficientes para satisfacer esta necesidad.
Esta conclusión se deriva de la constatación de que, en los últimos siete años, el número de estudiantes matriculados en carreras STEM en nuestro país ha descendido, en términos absolutos, en más de 65.000 profesionales. Además, en términos relativos, han pasado de representar el 30% del total de estudiantes en 2009 al 26% en 2016.
Según el director de Randstad Research, Valentin Bote, “proyectando estas cifras nos encontramos que el máximo de titulados STEM en la universidad española va alcanzarse en el 2017 y en los años siguientes vamos a observar un descenso de más del 3% anual, lo cual choca con la enorme demanda de estos perfiles por parte de las empresas”. Una situación que en palabras de Bote nos lleva a un “escenario complejo caracterizado por un problema de déficit de talento”.
Trabajadores especializados y líderes, los más buscados
La tecnología y la digitalización afectarán a la economía general, a las formas de consumo, y provocarán profundas transformaciones en el seno de las organizaciones. En este contexto, las empresas requieren de perfiles con determinadas habilidades intangibles, ligadas o no a la formación, para satisfacer las necesidades de sus usuarios y consumidores.
El 38% de los trabajadores que se buscarán en el futuro serán “knowledge workers”, es decir, profesionales cualificados con capacidades difícilmente duplicables. Le seguirá, con un 35%, la demanda de los clasificados como “líderes”, de perfiles con múltiples habilidades que guíen a las empresas en materia de innovación y desarrollo. Los trabajadores técnicos, por su parte, ocuparán el 18% de los puestos disponibles. Además, el 5% de las ofertas irán destinadas a operarios que desempeñen actividades poco cualificadas. Los especialistas en oficios (3%) y los especialistas de tareas (2%) completan el listado de categorías.
Fuente: http://www.equiposytalento.com/