La inversión en inteligencia artificial crece por encima del 30% en España.
El dato es de la firma de análisis IDC que acaba de revisar al alza sus previsiones para el mercado de TI en España, una industria que en el primer semestre del año ha cosechado unos 54.700 millones de euros, un 4,6% más frente al año anterior.
IDC esperaba en 2022 que este primer semestre del año la inversión de TI en España llegara a 53.500 millones de euros, con un crecimiento del 4% respecto al año anterior, pero la firma de análisis ha revisado sus expectativas y los datos que ahora arroja son mayores de los vaticinados: el mercado nacional de las tecnologías de la información ha aumentado a un ritmo del 4,6% logrando una facturación de 54.700 millones de euros.
La cifra se ha conseguido, explican desde la consultora, gracias al foco de las empresas y entidades públicas en fomentar, en concreto, “las plataformas digitales y escalables, la eficiencia sistémica y el impacto de la IA generativa, la transformación inteligente del puesto de trabajo, la seguridad y la sostenibilidad”.
La IA, en plena explosión
Una de las áreas que está creciendo con más empuje es la inteligencia artificial, en clara «explosión» en España, según IDC, sobre todo gracias al auge de las aplicaciones de la IA generativa. La inversión en IA está creciendo por encima del 30% respecto a 2022 y presenta incrementos de más de un 25% de media en todas las industrias, con casos de uso como sistemas de inteligencia y prevención de amenazas, recomendaciones y aumento del proceso de ventas, análisis e investigación de fraudes, agentes de atención al cliente mejorados o la optimización de las TI, como algunos de los más destacados por las empresas de nuestro país.
En lo que respecta a la IA generativa en concreto, desde IDC recuerdan que el 55% de las organizaciones europeas ya está explorando potenciales casos de uso, y el 21% de ellas tiene previsto invertir en el segundo semestre del año en este tipo de tecnología. “En la actualidad, los principales usos adoptados a nivel empresarial están orientados a aplicaciones de gestión del conocimiento, marketing conversacional y generación de código”, exponen desde la firma de análisis.
Crecimiento sostenible, pero más suave, en la nube pública
Los datos de IDC también apuntan a un crecimiento sostenible de la inversión en cloud pública, aunque ésta se ha suavizado en este periodo, siendo actualmente de casi un 14% (frente al más de 21% previsto).
En concreto, PaaS y SaaS crecen a un ritmo de más del 32% y casi un 18%, respectivamente. “El comportamiento tanto por sector como por tamaño de empresa se mantiene en alza, siendo servicios financieros e industria, así como las medianas y grandes empresas, aquellos segmentos que presentan mayor incremento en este primer semestre”, destaca la firma de análisis.
Los analistas de IDC también subrayan que las estrategias de infraestructura digital se están redefiniendo al calor de tendencias como el llamado ‘Consumo como servicio’, las cargas de trabajo de big data y los cambiantes requisitos de interconexión de redes.
Además, inciden en que en el ámbito del puesto de trabajo se siguen percibiendo tractores de inversión como la reducción de la brecha digital y la adopción de low-code para generar aplicaciones y procesos automatizados por parte del propio empleado.
Respecto de la sostenibilidad, añaden, se mantienen la adopción de la sostenibilidad en las operaciones y la racionalización o desacoplamiento de aplicaciones para la eficiencia del consumo energético, así como la inversión en soluciones de seguimiento de la huella de carbono.
Ciberseguridad, un mercado de 2.259 millones de euros en 2023
Este mercado alcanzará este año los 2.259 millones de euros, experimentando un incremento por encima del 10 frente a 2022. Los servicios gestionados de seguridad, los servicios de seguridad de red y los asociados a la gestión de identidades, que experimentan un crecimiento de más de un 10% respecto de la previsión estimada a finales de 2022, son los grandes impulsores de este segmento.
“La tendencia que se observa en las organizaciones apunta a la adopción de la seguridad cloud, zero trust y la evolución hacia SASE como framework de seguridad”, indican desde la firma de análisis.