¿Qué cualidades debe poseer un líder para una efectiva gestión de proyectos, aún con la incertidumbre que nos rodea en la actualidad?
Pese al eterno debate sobre si el líder nace o se hace, lo que ha dejado claro el escenario laboral post COVID-19 es que el líder, sobre todo, debe tener la suficiente flexibilidad y capacidad resolutiva para responder a la incertidumbre del momento, abrazar el cambio para convertirlo en oportunidad y, además, seguir manteniendo motivado y cohesionado al equipo. Ser una persona coherente y metódica, con una probada capacidad analítica y anticipativa y una sobrada inteligencia emocional, también resultará clave.
Un nuevo paradigma en la gestión de proyectos
Durante las primeras semanas tras decretarse el estado de alarma y, posteriormente, el confinamiento y la obligatoriedad de teletrabajo siempre que la actividad empresarial así lo permitiera, ya se empezó a ver claramente que las prácticas llevadas a cabo en el seno de las compañías iban a tener que adaptarse. Al menos si se quería garantizar la sostenibilidad del negocio. Ello afectaba por igual a procesos y relaciones, formas de reportar y comunicarse, de trabajar en equipo, etc., pero también en la forma de liderar a unas plantillas que, entonces -y todavía ahora-, estaban dispersas y preocupadas por el devenir de los acontecimientos. Ahora sí, las compañías necesitaban a sus cabezas líderes flexibles, resolutivos y estratégicos, pero también con las habilidades emocionales e interpersonalespara mantener a cada uno de sus subordinados alineados con los valores corporativos.
Pese a la incertidumbre, cabía seguir siendo metódicos en términos de asignación de tareas, explicación de objetivos, resolución de dudas, reporte y evaluación del desempeño, dotación de recursos formativos (cursos, webinars, coaching, etc.), algo que serviría -y sirve- para mantener al máximo la normalidad. También para dotar a los empleados de una hoja de ruta a la que acudir a la hora de llevar a cabo los proyectos de manera efectiva. La escucha activa, la comunicación continua, la empatía, la confianza, la credibilidad y mostrarse accesible en todo momento serviría asimismo para mantener al equipo motivado y cohesionado.
Visión clara y estratégica
En 2018, Google, una de las mejores empresas a nivel internacional que revalida esta condición año tras año, hizo públicas qué diez actitudes eran claves para ser un gran jefe. La elección de estas no fue algo baladí, sino que se apoyó en un estudio iniciado diez años atrás, titulado “Proyecto Oxígeno”. En base a esta investigación, Google reveló que un buen líder…
- es un buen coach
- empodera al equipo
- crea un clima de trabajo inclusivo
- está centrado en la productividad y los resultados
- es un buen comunicador
- apoya el desarrollo profesional de sus empleados
- tiene una visión muy clara y una estrategia para todo el equipo
- tiene habilidades técnicas para poder aconsejar a su equipo
- colabora dentro de la compañía
- no se arruga a la hora de tomar decisiones
Todas y cada una de esas cualidades son 100% aplicables en la época post pandemia en la que nos hallamos. Es más, muchas de ellas han probado su valía precisamente ahora. En términos generales, según varios informes, siete de cada diez líderes se sienten preparados para afrontar los retos post COVID. Una determinación que les hace estar seguros ante los desafíos que, vaticinan, traerá consigo esta nueva era y que son, en este orden, mantener la continuidad del negocio, gestionar las personas en entornos digitales, dotarles de nuevos conocimientos, gestionar su desempeño y favorecer su motivación en un entorno remoto.
Para todos aquellos que aun así deseen ahondar en todo este tipo de habilidades de liderazgo, Grupo CEGOS ofrece una serie de soluciones digitales síncronas que, bajo el nombre de #UP, buscan mejorar sus habilidades de negociación. Todo ello, aplicando la metodología 4Real, un modelo de aprendizaje que contempla el entrenamiento individual del empleado, el apoyo de los superiores o colegas y un taller virtual, que permite aplicar los nuevos conocimientos adquiridos en el trabajo diario. Uno de estos UPS es el de Liderazgo en Gestión de proyectos.
Fuente: https://www.cegos.es/